En su discurso ante la 80° Asamblea General de Naciones Unidas el presidente Yamandú Orsi se refirió a la creciente tensión de conflictos en el mundo y remarcó la vocación de Uruguay por la construcción del diálogo, condenó toda forma de terrormismo y llamó a dejar de lado "el viejo precepto de que la guerra es la continuación de la política por otros medios".
Orsi destacó el rol de Uruguay por sus posiciones históricas a favor de la resolución pacífica de los conflictos, su respeto irrestricto al derecho internacional como la mayor garantía para la soberanía de los pueblos.
"Desde ese pequeño país, que cultiva la tolerancia, el diálogo y el acuerdo como clave histórica de convivencia, y que está inserto en un continente sin conflictos ni guerras entre Estados, venimos a esta Asamblea a sumar esfuerzos para contribuir con la estabilidad y la paz en un mundo cada vez más convulsionado y desafiante", expresó.
Orsi se refirió a la experiencia de Uruguay como mediador para la paz y mencionó que Uruguay, en 1921, fue el primer Estado del mundo en aceptar la jurisdicción de la Corte Permanente de Justicia Internacional, predecesora de la Corte Internacional de Justicia. Además señaló el despliegue de batallones uruguayos en operaciones de paz, en los últimos 35 años.
"En función de estos y otros antecedentes históricos, me permito afirmar que Uruguay está en condiciones inmejorables de ofrecerse al mundo como anfitrión de negociaciones, como promotor de redes de diálogo y mediación, que conduzcan a la construcción de la paz y la prevención de conflictos", afirmó.