La Alianza Uruguaya por el Agua reunió a especialistas en medioambiente y sostenibilidad

La Alianza Uruguaya por el Agua (AUA) llevó adelante el encuentro “Agua, ambiente y sostenibilidad. Visiones técnicas en año electoral”, junto a referentes en la temática. El director ejecutivo de AUA, Mauro de la Vega, realizó una introducción respecto a la actividad que realiza la organización en el país y los proyectos que lleva adelante. Además, ahondó en la necesidad de crear políticas conjuntas para estar preparados antes posibles eventos climáticos.

Por su parte, Sergio Campos, jefe de la División de Agua y Saneamiento del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), destacó lo privilegiada que es América Latina, ya que tiene un tercio del agua fresca del mundo, y resaltó que la región podría compartir este recurso siempre que sea utilizado de forma eficiente.  En este marco, destacó que, si bien la región cuenta con un gran capital hídrico, la realidad antes de la pandemia demostró que el 40% de la superficie del territorio se enfrenta a un estrés hídrico, que el 70% del agua dulce se utiliza en la agricultura para la producción de alimentos y que el 40% de las tierras de las cuencas está degradado.

El encuentro se desarrolló en distintos módulos en el que representantes políticos del Partido Nacional, Colorado y Frente Amplio abordaron aspectos relacionados a la gestión del recurso hídrico y al fortalecimiento de la infraestructura para garantizar su seguridad. En su intervención, el subsecretario de Ambiente y representante del Partido Nacional, Gerardo Amarilla, destacó la creación del Ministerio de Ambiente durante este periodo de gobierno como respuesta a la necesidad de fortalecer la institucionalidad en materia medioambiental y resaltó la necesidad de seguir construyendo sinergias con los distintos actores del mercado para asegurar el suministro del agua potable.

“Es necesario fortalecer la Dirección Nacional de Agua en sus capacidades técnicas y promover la coordinación con otros actores políticos, como el Ministerio de Industria, el de Ganadería, OSE, los gobiernos departamentales y también con el sector privado”, explicó. Amarilla se refirió al proyecto Arazatí, una iniciativa de inversión privada que prevé la construcción de infraestructura para potabilizar el agua. Además, puso énfasis en la necesidad de crear alianzas con el sector para la extensión de la red de saneamiento y tratamiento de aguas residuales en todo el territorio y en lo referido a la soluciones integrales y colectivas para el riego en sector productivo. 

Los representantes del Frente Amplio, Verónica Piñeiro, gerenta de Gestión Ambiental de la Intendencia de Montevideo, y Alejandro Nario, ex director Nacional de Medio Ambiente, coincidieron con la propuesta de Amarilla respecto a la necesidad del fortalecimiento de las instituciones para lograr la preservación y el uso eficiente del recurso hídrico, así como de la creación de una estrategia para el riego que potencie las capacidades productivas del país.

También mencionaron las iniciativas en la materia, como el Plan Nacional de Agua, el Plan Nacional de Saneamiento y el Plan Nacional de Drenaje Pluvial, creados en anteriores periodos de gobierno, y enfatizaron que es necesario no solo ceñirse a los planes para utilizarlos como una hoja de ruta que guíe el camino que se debe seguir, sino ponerlos en funcionamiento.

“Es momento de aterrizar esos planes en acciones concretas y para ello es clave un acuerdo nacional y la construcción de un diálogo por el agua, con la rectoría del Poder Ejecutivo, pero también con un fuerte sustento de los actores involucrados en todas sus dimensiones, como son los consumidores, los productores, la academia, el sector privado y público”, detalló Nario. De igual manera mencionaron que es menester la creación de protocolos de actuación para dar respuesta ante estas catástrofes climáticas.

“Uruguay tiene la institucionalidad para hacer frente a estas situaciones críticas, que entendemos que tienen que quedar por fuera de los costos políticos. Creemos que el país tiene la capacidad de trabajar y articular junto a todos los actores vinculados al agua en la creación de estos protocolos”, comentó Piñeiro. 

En este sentido, Andrés Saizar, representante del Partido Colorado y asesor del ministro de Ambiente, hizo hincapié en que es necesario gestionar la incertidumbre en materia climática tomando contacto con lo que está sucediendo a partir del análisis de la información y en base a ella comenzar a trabajar sobre planes de contingencia.  “Lo central para la seguridad hídrica es crear escenarios ante posibles situaciones de variabilidad climática como una forma de eliminar estas incertidumbres” destacó. 

En materia de propuestas de inversión para la infraestructura, los representantes de los tres partidos coincidieron en que OSE requiere un fortalecimiento de sus capacidades para potenciar su labor, dotarla de mayor capacidad técnica, así como de un respaldo económico para que pueda seguir realizando inversiones y extendiendo su servicio. También enfatizaron la necesidad de descentralización del organismo para una mejor gestión.

Destacaron la importancia de fortalecer las cuencas de agua en el país y en este sentido, tanto los especialistas del Frente Amplio como el del Partido Nacional trajeron a colación el desarrollo del proyecto de la represa en Casupá para el abastecimiento de agua dulce en el área metropolitana. En lo referido a las medidas prioritarias que cada uno de los partidos implementaría en un primer año de gobierno, los representantes del Frente Amplio destacaron que pondrían el foco en crear soluciones y propuestas en torno al riesgo hídrico a partir de una discusión que integre a todos los actores de la sociedad.