La inversión en turismo se triplicó desde 2020

Nicolás García, intendente de Rocha

 

El objetivo más importante de la Intendencia de Rocha en materia de turismo es salir del brete de la temporada estival para extender la oferta a todo el año.

“Nosotros, que trabajamos todo el año para el turismo, es claro que tenemos que superar lo estacional e ir desparramando la oferta” para los meses de otoño, invierno y primavera. “Para ello tenemos herramientas y las estamos utilizando”, aseguró el intendente de ese departamento, Nicolás García, al tomar su turno en la serie de exposiciones junto a sus colegas de Maldonado y Canelones en una nueva edición de Desayunos Útiles.

Recordó que Rocha tiene una vez y media la superficie de Maldonado, con 180 kilómetros de costa. Sin embargo, su población solo pasa las 70.000 personas, frente a más de 200.000 que residen en el departamento vecino.

En la parte central de su charla, informó que los principales rubros económicos, las tres patas grandes de nuestro departamento, son el arroz, la carne y el turismo, un sector este último que, “desde nuestra administración, no solo mediante la dirección de turismo sino desde prácticamente todas las demás, trabajan en parte para esa pata fuerte que queremos multiplicar”.

“La inversión en turismo y obras de soporte se ha triplicado” desde que asumió el cargo en 2020 el intendente precedente en este período de gobierno, Alejo Umpiérrez”, afirmó García.

Añadió que la primera acción encarda fue solicitarle a la Junta Departamental la aprobación de un fideicomiso de 25 millones de dólares, más de la mitad de los cuales iban a ser volcados a la costa, pero no se pudo obtener completo, sino apenas unos ocho millones. Por eso se apeló a aumentar los ingresos mediante una amnistía tributaria, gestión de morosos y atención a buenos pagadores, lo cual permitió “llegar a un récord histórico”.

De ese presupuesto, más de 200 millones de pesos se destinaron a la Dirección de Turismo, monto con el cual “pudimos fortalecer los recursos humanos en todas las áreas del sector para la temporada estival”, dijo.

De ese modo la cantidad de funcionarios del área llega hoy a 1.100, 300 de ellos a través de la Fundación A Ganar, la mitad de los cuales se destinó al complejo de cabañas y el camping de La Aguada, a las cabañas del Parque Andresito en La Paloma y a la recolección de residuos. Parte de ese dinero fue para la contratación de personas idóneas en actividades recreativas, de 142 guardavidas para cubrir los 54 puestos existentes a lo largo de la costa oceánica, la incorporación de 12 guardaparques y para colaborar con la Dirección Nacional de Bomberos.

También se hicieron obras viales, como la red de caminería departamental, de 2.200 kilómetros, 1.600 de los cuales se ha resuelto mantener por razones estratégicas. Se pavimentó con tratamiento bituminoso el acceso a la Laguna de Rocha, la conexión Las Garzas en Caracol, en la ruta 9, y obviamente a comienzos de cada temporada se hacen intervenciones especiales en los balnearios.

Grosso modo, se trató de inversiones de seis millones de dólares en La Paloma, de dos millones en Punta del Diablo, de 1,5 millones en Barra de Chuy, de 700.000 dólares en Aguas Dulces y de unos 800.000 dólares en La Pedrera”, detalló.

Ambiente, historia e hidrovía

García dio cuenta de que el área de Cultura de la Intendencia de Rocha ha generado “marca departamento”, “hemos continuado otras que venían de administraciones pasadas que funcionan muy bien como La Semana de Rocha”, que en esta última edición convocó a unas 4.000 personas por noche para ver espectáculos de calidad como Marama, Los Buitres, Los Nocheros y otros. “El apoyo a cada fiesta por pueblo a lo largo de todo el año, como modo de descentralizar esta actividad, es una constante”, añadió.

En cuanto a la Dirección de Deportes, “recordamos que Rocha es la capital del surf en Uruguay, con las olas de mejor calidad del país, lo cual genera un turismo especial todo el año, con muchos visitantes de Brasil y Argentina gracias a que con las aplicaciones de internet se sabe con mucha anticipación cuándo va a ser el momento mejor para este deporte”. “Vienen además por miles desde Montevideo, Canelones e, incluso, de Maldonado, todos los cuales, con sus familias, mueven mucho el comercio, la gastronomía, hotelería y demás”, destacó.

“Tenemos también una de las etapas del campeonato automovilístico de rally, travesías en aguas abiertas, natación, el circuito de vóley playa Uruguay y Brasil, motocross enduro, la Vuelta Ciclista del Uruguay, que pasa por el departamento, y los triatlones”, complementó.

Otro aspecto resaltado por García fue el trabajo que lleva adelantes la Dirección de Ambiente. Rocha es una zona de áreas protegidas en su totalidad, con reserva de biosferas, humedales, palmares, el Cabo Polonio, Cerro Verde e Islas Verdes, y las lagunas de Rocha, de Castillo y Garzón, enumeró.

“Coincido con el intendente Enrique Antía en que las áreas protegidas no pueden estar cerradas con candado, sino que tienen que ser sustento de la sociedad que vive al lado de ellas y tienen que, obviamente, vivir en armonía; por eso la dirección departamental lo está llevando adelante”, indicó.

Al respecto informó que, entre otras medidas, Rocha ha firmado convenios con los centros comerciales, y el departamento hoy no acepta plásticos de un solo uso y es obligatorio que todos los paradores y chiringos de playa tengan vasitos biodegradables.

El intendente de Rocha reiteró que muchas de las acciones están dirigidas a desestacionalizar el turismo de verano, para lo cual como oferta están las sierras, dos áreas protegidas fabulosas departamentales, no nacionales. Una de ellas es el potrero del Bañado de los Indios, de 2.600 hectáreas, que ha sido blindado para que en el futuro se pueda compartir con la gente, instalando planeadores de paseo como los que existen en zonas similares en el estado estadounidense de Florida.

“La otra es una zona de 800 hectáreas de islas, como la del Padre, en el río Cebollatí, que es propiedad de la intendencia. Se trata del remito amazónico más al sur”, abundante en biodiversidad y que se conecta al corredor biológico subtropical Mata Atlántica de Brasil, donde se encuentran especies aún sin clasificar y otras que se creían extintas o en riesgo de ello, señaló. “Aquí fue visto el último yaguareté en Uruguay”, acotó.

A todos esos sitios se agrega el recorrido de turismo histórico, que se promociona especialmente, según dijo. “Está bien ubicada la zona donde se desarrolló la Batalla de India Muerta (librada el 27 de marzo de 1845 en el marco de la Guerra Grande), la Fortaleza de Santa Teresa y el Fuerte de San Miguel, los dos destacamentos militares de época colonial española más antiguos después de Cartagena, en Colombia”, abundó.

El jerarca también se refirió a los corredores oceánicos para desarrollar paseos turísticos, utilizando el puerto de La Paloma, que está subutilizado. “Queremos copiar la experiencia de Maldonado con los tres botes eléctricos adquiridos en Juan Lacaze para hacer travesías marítimas y ver desde allí por ejemplo la laguna de Rocha o las tres islas que están frente a Cabo Polonio y Valizas”, apuntó.

Finalmente, García se manifestó entusiasmado con la aprobación del proyecto de potencialidad turística de la hidrovía Uruguay-Brasil, que originalmente estaba pensada solo para salida de producción hacia el puerto brasileño de Río Grande.

La propuesta, que ahora pasa a la fase de factibilidad financiada por la Cepal y la CAF con 1,2 millones de dólares no reembolsables, incluye una conexión con ferri u otro tipo de embarcaciones adecuadas entre el puerto de Porto Alegre y una terminal en el arroyo San Miguel, en Rocha, pasando por la Lagoa dos Patos, el canal San Gonzalo y la laguna Merín, una conexión fluvial que existió en las primeras décadas del siglo XX.