El salario mínimo nacional tendrá un incremento total de 7,54% durante 2026, según lo anunciado tras una reunión del Consejo Superior Tripartito. La directora nacional de Trabajo, Marcela Barrios, informó que el ajuste se aplicará en dos etapas: un aumento de 4,1% a partir del 1.º de enero y un segundo incremento de 3,3% en julio.
Con la suba prevista para enero, el salario mínimo pasará a ubicarse en $ 24.572, mientras que en julio alcanzará los $ 25.383. La jerarca señaló que la medida supera el porcentaje otorgado en la primera franja salarial, que fue del 6%, y responde al objetivo del Gobierno de continuar fortaleciendo el salario mínimo. "El incremento representa un salto cualitativo en el poder adquisitivo de los salarios más sumergidos", afirmó.
Barrios destacó que este ajuste se da en un escenario de inflación controlada, proyectada en torno al 4%, lo que refuerza el impacto positivo del aumento sobre los ingresos de los trabajadores con menores remuneraciones.
Avances en negociación colectiva
En relación con la negociación colectiva, la directora informó que aproximadamente el 60% de las mesas de los Consejos de Salarios ya alcanzaron acuerdos. Asimismo, explicó que en el ámbito del Consejo Superior Tripartito se resolvió priorizar la negociación entre las partes siempre que exista margen para el diálogo, procurando evitar la intervención directa del Poder Ejecutivo.
En ese sentido, se acordó también que el 31 de diciembre no será considerado una fecha límite para cerrar negociaciones, excepto en aquellos sectores en los que el proceso esté agotado y no se vislumbre posibilidad de consenso.
Agenda laboral para 2026
De cara al próximo año, la cartera de Trabajo definió una agenda orientada a la reglamentación de convenios de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) que aún se encuentran pendientes. Barrios mencionó especialmente los convenios 158, 153 y 190, vinculados a la terminación de la relación laboral, la duración del trabajo en el transporte por carretera y la erradicación de la violencia y el acoso en el ámbito laboral.
Si bien aclaró que no existen plazos concretos establecidos para avanzar en estas reglamentaciones, subrayó que el ministerio tiene "una agenda definida y un horizonte claro" hacia el cual orientar su trabajo, apostando siempre a la negociación como principal herramienta para alcanzar consensos.